- Cebolla, cebolleta o cebollitas francesas.
- Un trozo de raiz de jengibre
- Azúcar morena
- Una copita de coñac
- Agua.
Preparación:
Según el tipo de cebolla elegido, las dejaremos enteras o las laminaremos.
El jengibre se pela y se ralla sin llegar nunca al centro que es muy basto.
En un cacillo, ponemos las cebollas, la ralladura de jengibre y les añadimos unas cuantas cucharadas de azúcar moreno, el poquito de coñac, junto con un poco de sal y pimienta, y el agua y dejamos cocer suavemente durante al menos una hora y media, mejor dos, añadiendo agua si fuese necesario.
Antes de servir, coceremos fuerte hasta que se reduzca el líquido totalmente.
Observaciones:
- El jengibre es una deliciosa especia, pero pica muchísimo. El truco es hacerlo durante mucho tiempo; entonces ese picor desaparece y el sabor y aroma son increíbles.
- Esta guarnición es ideal para recetas de aves y cerdo.
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